Cuando un buen hombre te hiere
Cuando nadie tiene la culpa, cuando no te equivocaste, cuando no hubo mentiras. Nadie nos enseña que hacer cuando un buen hombre te lastima.
Alguna vez dije que nunca había terminado bien con una persona, bueno ahora se que se puede terminar bien.
Porque ¿cómo terminar mal con alguien que no hizo nada malo?
No me amaba, pero eso no significa que sea una mala persona.
Lo conocí en febrero de este año, lo primero que pensé de él es que era tan adorable, hablar se sentía tan fácil, tan natural. Creí que podía tener algo con él, creí que él quería tener algo conmigo.
Hubo muchos momentos en los que yo se que tuve que parar, en los que mis amigos me dijeron que parara, pero como detenías a un corazón que no sabia que podía latir así, que podía latir tanto después de mucho tiempo.
Me enamoré, de la forma más hermosa e intensa que se puede estar, mis plegarias se inundaron de su nombre, mis sueños comenzaron a tener un solo protagonista. Comencé a escribir de amor porque yo soy todo menos tibia.
Hablábamos el mismo idioma, reíamos de los mismos chistes, me sentía tan feliz cada vez que en mi celular veía su nombre, escuchar su voz alegraba mi alma. Aferrarme al amor que creía existía fue lo que me hizo poder estar en pie muchos días.
Movió algo en mi desde el primer encuentro, me puso tan nerviosa, hacia que las palabras salieran involuntariamente de mi boca. Supe que me gustaba después de escucharlo cantarme en francés y después de aquel primer beso, fue tan perfecto, creí que era por quien tanto había estado esperando.
Ya no podía darle mi corazón a nadie más, no importaba que tanto quisieran impresionarme pagando una comida costosa, o cuanto rogaran por un pequeño momento de mi atención, porque cuando todos se iban a alabar mi físico y decir lo mucho que les atraía, en mi cabeza solo estaba aquel chico dulce que me llevaba a casa, tomaba mi mano y me decía gracias por salir conmigo hoy, me encanto estar contigo, tomaba mi rostro y me besaba de esa forma que me gustaba ser besada.
Fue la primera vez que sentí que alguien se estaba interesando por mí, por mi verdadero yo y no por la chica linda de Instagram.
En mi corazón guardaré los recuerdos de la primera vez que nos dimos la mano, la primera vez que dijimos te quiero, la primera vez que estuvimos juntos.
Supe que estaba enamorada cuando lo vi y sentí que podía hacer cualquier cosa por él, que podía esperarlo todo el tiempo que él me pidiera, que aceptaría cualquier cosa que me permitiera estar cerca suyo.
Solo quería ser vista por él, ser abrazada por él, que fuera él único dueño de mis besos, él único que supiera como se siente mi amor.
No eramos perfectos, no iba a ser fácil, nunca lo fue, pero yo sentía que podía hacer que funcionara, que mi amor podía superarlo todo.
Por mucho que lo quisiera y me hiciera feliz, tambien estuve terriblemente triste muchos días, porque no quería admitir lo que todo el mundo sabia y yo me esforzaba por esconder, no me amaba.
Mi amor no lo alcanzó.
No fue suficiente para que sucediéramos.
Él dice que no es el momento, ¿pero alguna vez lo fue?.
Siempre estaba esperándolo, siempre lista para él, no me importaba no dormir por terminar todos mis trabajos de la universidad y darle mi tiempo, cuidaba lo que comía porque moriría antes de que me viera inflamada, me paraba muy temprano para usar mis miles de cremas y jabones, mis mascarillas y todos mis trucos para verme hermosa.
Tal vez ese fue mi error, estar demasiado disponible.
Aun así fui muy feliz cada vez que estuve entre sus brazos, cada vez que sentí su calor y olí su perfume, cada día al recibir un buenos días, cuando recordaba cosas que eran importantes, cuando me deseaba suerte y le contaba todo de mi, que sentía, que pensaba, que hacia, quería ser su mundo, tal y como el se estaba convirtiendo en el mio.
A veces no importa que tanto estés disponible, ni que tanto muestres que amas, porque cuando el corazón de la otra persona no esta disponible para ti, solo terminas pensando en por que yo no, ¿por qué no hablaba conmigo de las cosas que le dolían? ¿por qué sentía soledad cuando yo moría por un mensaje, una llamada?.
Es difícil procesar lo que sentí y aun siento, porque nunca me trato mal o me hizo sentir mal, fue mi apoyo cuando necesite ser apoyada, mi paño de lagrimas cuando necesite ser contenida, aun y a la distancia intentaba hacerme feliz en los momentos que tomaba para hablarme.
Suena tan complicado y contradictorio, y es porque lo es, porque no es una mala persona, porque nadie se equivoco, no hay a quien culpar, amé de la mejor manera que pude hacerlo y él me mostro a su modo y su capacidad lo que sentía por mí.
Tal vez mis expectativas fueron más grandes y el no cumplirlas me duele. Todos los planes que no van a realizarse, los lugares a los que no iremos juntos, los besos que no daremos, las cartas de amor que no serán entregadas. Ahora me encuentro en ese momento en el que estoy en duelo por lo que fue, y nunca más volverá a ser, pero tambien por lo que nunca sucedió.
No tengo mucho a que aferrarme, no tenemos fotos juntos, o algo a lo que pudiera llamar nuestra canción, no hubo promesas vacías, nunca me dio cartas, mucho menos unas flores. Nuestra relación siempre se mantuvo en el filo de más que una amistad, pero menos que una relación, moría porque las cosas cambiaran y me repetía a mi misma que todo seria mejor cuando se convirtiera en una relación.
Me duele aceptar que siempre estuvo destinado al fracaso, conocerlo me cambió, me hizo creer en que podía volver a tener una relación, aún y con todo el caos, fue el hombre que mejor me ha tratado, siempre caballeroso, atento y amable. Yo se que no es con él y no lo será, pero espero encontrar a alguien dulce como él, de corazón sincero y amable que se tome el tiempo de conocerme y llegar a derretir el muro que pongo ante todos para evitar ser dañada.
Mi corazón se rompió, y se romperá el día que lo vea con alguien más,porque fue el ojala que más desee se hiciera realidad, fue la despedida que más veces escribí y menos quería decir, fue mi motor, mi motivación para aquellos días grises, fue aquel que me hizo pensar en que podía volver a enamorarme y darlo todo.
Como siempre algo muy mio y muy personal, siéntanse libres de comentar.
Hay veces que hubiera deseado culpar a alguien. Culpar las almas que lo influenciaron, culpar sus parientes, culparlo a el, o por lo menos culparme a mi. Pero me di cuenta que hay veces que por mas que sobrepenses, no hay culpables, simplemente es la vida misma siendo lo que es
Que rara esa sensación fea y triste pero madura cuando te das cuenta que ella no estaba siendo mala sino que uno estaba muy enamorado.